SUSPENSIÓN DE RECLAMO DE HONORARIOS POR PARTE DE APODERADOS DE LA AFIP

La Federación de Centros Comerciales de la Provincia de Santa Fe, FECECO, realizó una presentación a la Administración Federal de Ingresos Públicos solicitando SUSPENDA LA ACCIÓN DE SUS APODERADOS que, en estos momentos de una crisis económica-financiera de características terminales para muchas PYMEs y contribuyentes, están enviando intimaciones de pago de honorarios por causas judiciales de tiempo atrás.  La FECECO entiende  que es casi irracional pretender que los contribuyentes hagan frente a deudas de honorarios judiciales en momentos en los cuales no pueden afrontar los gastos fijos de sus comercios y PYMEs.    Si se tiene en cuenta que estas intimaciones generan mayores gastos y costos que aumentar considerablemente la deuda y que estos importes no irían a las arcas del Estado sino a los bolsillos de los profesionales, esto resulta una situación desubicada y reprochable.

En su presentación, en la cual requieren una atención inmediata de la autoridad máxima del organismo,  la FE.CE.CO. expresa:

“Nos dirigimos a la Sra. Administradora a efectos de solicitarle arbitre las medidas que correspondan a efectos que los profesionales del Organismo que Ud conduce SUSPENDAN INMEDIATAMENTE el envío de intimaciones, notificaciones y cédulas de apremio por deudas de honorarios profesionales en causas tramitadas como apoderados de AFIP.

Es evidente que ante la grave crisis económica y financiera generada por el dictado del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio como medida preventiva ante la pandemia del COVID-19 los contribuyentes no cuentan con los recursos necesarios para hacer frente a los reclamos de estos profesionales provocando solamente mayores gastos y costos a los sectores que agónicamente están intentando sobrevivir a la situación actual.

Por lo expuesto le solicitamos, además, que QUEDEN SIN EFECTO los reclamos formulados como así también los gastos, intereses, costos que estos pudiesen generar, dado que  se constituirán en una pesada carga económica difícil de afrontar en la actualidad, ó en el incierto futuro que se avisora, máxime teniendo en cuenta que dichos montos ni siquiera están direccionados al Estado sino que tienen como destino los bolsillos de los mismos profesionales.”